dd/mm/aaaa

Despertarse por la mañana. Escuchar la canción que suena en el reproductor de música. Incorporarse lentamente. Y, mientras bajo de la cama al mundo real, como astronauta descendiendo de su nave a un planeta extraño, pronuncio una fecha.

¿Una fecha?

Hago una pausa y me pregunto porqué mencioné esa fecha. Tal vez esa es la fecha de hoy, digo; pero una rápida consulta al calendario más cercano me demuestra que no es así.

Da igual. Seguramente estaba soñando algo y al despertar, la fecha se quedó adherida a la punta de la lengua, esperando a ser liberada, o algo así.

Dos horas más tarde, estando en el patio, me pongo a pensar sobre un par de cosas sin importancia, trivialidades que me ayudan a pasar el rato. Y una vez más, día/mes/año... bueno, el año no es mencionado, aunque llego a la conclusión de que el 2013 está implícito. Como sea. No tiene importancia.

Olvido todo el asunto. Escucho música mientras leo y hago algunas otras cosas.

Al mediodía, mientras me baño, una vez más, vuelve a pasar. La misma fecha. Olvido todo lo que estaba pensando en ese momento y me enfoco en ella. ¿Porqué tanta insistencia?. La analizo un poco más y no encuentro en ella ningún guiño profético, tampoco parece un mensaje del Mago (el cual sigue brillando por su ausencia). Es solo una fecha. Aunque... en el fondo (y después de tantas menciones), tal vez no sea "solo" una fecha.

Recuerdo al Adbekunkus de Cortazar, y pienso que esto es algo parecido. Mi propio Adbekunkus, en versión dd/mm/aaaa.

Tal vez estoy exagerando y le estoy dando mucha importancia. Seguramente ese día llegará y se irá, como todos los demás. O tal vez no. Nunca se sabe.

Y el mago que no regresa...

Happy Birthday, Kurt!

Qué importa que un niño, del otro lado del mundo o en otro país, nazca en este momento, mientras no pertenezca a nuestra familia o a nuestro círculo social, un nacimiento es solo un nacimiento más, un número que se suma a las estadísticas. Pero con el paso del tiempo, ese nacimiento puede pasar a ser un momento importante para muchas personas más.

Es así, como un hospital bombardeado por los nazis, en Liverpool, puede ser el lugar de nacimiento de un pequeño que, años más tarde, pasaría a formar parte de la agrupación más importante en toda la historia del rock (aunque a algunos, esto les parezca una exageración). Qué hubiera sido del mundo si John Lennon no hubiera nacido en medio de aquel bombardeo. Bueno, eso es algo que nunca sabremos. Pero lo que si se sabe es que, algunas décadas después, su música inspiraría a otro niño, en Aberdeen, en el estado de Washington, para tomar algunos trastos de su cocina y golpearlos como si fueran tambores, mientras cantaba las canciones de los Beatles.

Fue un 20 de Febrero de 1967 cuando este niño llegó a este mundo. Y a pesar de su trágico final, su música cambió la vida de muchas personas. No fue un defensor de las causas sociales, tampoco predicó la paz y el amor (al menos no de manera directa), pero tenía principios. Él odiaba el machismo y en cierta medida, apoyaba el movimiento feminista. Era un hombre sencillo que disfrutaba de las cosas sencillas y además, tenía un gran carisma.

Dave Grohl (vocalista de los Foo Fighters y ex-baterista de Nirvana) cuenta en una entrevista que cada vez que Kurt tocaba la guitarra era "hermoso". Michael Stipe (vocalista de R.E.M.) tuvo una gran amistad con Kurt y llegó a ser el padrino de su hija (Frances Bean Cobain), él lo describe como una persona muy sensible (quizás demasiado).

En fin, él era una persona especial. Y por eso, hoy (un poco tarde), y después de haberlo hecho en todas las demás redes sociales, celebramos aquí también su nacimiento, porque su música ha sido muy importante para mi, en varias ocasiones.

Así que, para finalizar este post, los dejamos con una canción, la cual no es originalmente de Nirvana (la versión original es de Terry Jacks), pero me gustó desde la primera vez que la escuché en la voz de Kurt Cobain.

Mi memoria existe, mi recuerdo vivirá siempre, y mi música,

en la gloria, será la salvación del maldito infierno donde habitamos.
-Kurt Cobain-

Nos leemos en el siguiente post, damas y caballeros.

De música y libros

Tantos libros y tan poco tiempo, dijo alguien en algún momento... y tanta música también, añadió el Mago.

Seguimos sin saber en dónde se encuentra el Mago, pero al menos ya sabemos que se encuentra bien, aunque no piensa regresar todavía. Por el momento solo ha enviado un mensaje (Enciéndete conmigo, no estás solo) y una canción: Rock n' Roll Suicide. Esperemos que regrese pronto. Mientras tanto, nosotros seguimos con nuestras actividades normales.

En Tumblr, alguien me preguntó si había leído Kafka en la Orilla, y aunque mi respuesta fue negativa, prometí leer ese libro al terminar de leer el libro de Charles Bukowsky que estoy leyendo actualmente, ya tenía planeado leer a Haruki Murakami nuevamente pero no me decidía aun (las opciones eran La Caza del Carnero Salvaje y Kafka en la Orilla), así que, por mayoría de votos, el siguiente en la lista será Kafka en la Orilla.

En cuanto a la música, he decidido variar un poco. Ya que siempre escucho la misma música, y de repente, eso empieza a ser tedioso, pensé que sería interesante hacer a un lado toda mi música favorita (o al menos, la mayoría de las canciones), y enfocarme en aquellos grupos de los cuales solo he escuchado y me han gustado un par de canciones. Esta semana escuché a The Smiths y Joy Division. Y hasta el momento, he añadido dos canciones más a mi lista de canciones favoritas: There Is a Light That Never Goes Out (Hay una luz que nunca se apaga) y Love Will Tear Us Apart (El amor nos destrozará).

Damas y caballeros, con ustedes, las emblemáticas bandas de Ian Curtis y Morrisey.

Esta canción me gustó desde hace tiempo, cuando la escuché en el soundtrack de la película Donnie Darko, pero hasta hace poco, no sabía de quién era.

Desde que descubrí a los Smiths y Morrisey me volví fan del cantante; pero fue hasta esta semana, que me puse a escuchar mejor sus canciones, y descubrí que me gustan más de lo que pensaba. Morir a tu lado es una manera celestial de morir, dice la canción. La misma frase es citada por Zooey Deschanel, en la película 500 Days of Summer, cuando menciona que los Smiths son su banda favorita.

Pero bueno, sin más que añadir por el momento, me despido, que tengan un buen día... nos leemos en otra ocasión.

PD: En el otro blog se ha publicado un relato que escribí hace un par de días, por si les interesa, click aquí. Y si no les interesa, pues no dan click y ya ¬¬

Febrero... y aquí seguimos

Y después de varios intentos de publicar algo en el blog (intentos que no pasaban de entrar al blog y salir después de cinco minutos de no encontrar nada que decir), y hasta de haber pensado en la posibilidad de cerrarlo (temporal o definitivamente por tiempo indefinido), andamos por aquí nuevamente.

En fin, ya estamos en el segundo mes del año, ha iniciado un nuevo semestre en la universidad y esta vez, en serio, espero no dejar todo para el final. Debo aceptar que es emocionante aceptar el reto de hacer todo a contrarreloj y demostrarles a los demás (bueno, solo a mi) que puedo terminar todo a tiempo, pero no es divertido cuando eso me cuesta valiosas horas de sueño... horas de sueño que bien podría aprovechar de otra manera... y no, no me refiero a dormir, ya que de todas formas me dormiría tarde, pero al menos me desvelaría haciendo otras cosas, como por ejemplo, leer algún libro de la enorme lista de libros que aun tengo pendientes por leer, ver alguna película/serie/anime/loquesea, practicar con la guitarra, o conversar con alguna otra victima del insomnio (últimamente, cierta persona ha hecho que mis noches de insomnio sean más interesantes... bueno, esa es otra historia).

¿En qué estaba? Ah si. Creo que me he acostumbrado a hacer todo de esta manera. Dejo que las cosas se acumulen, para después, mágicamente, hacer todo en un tiempo límite y con la presión de no saber si terminaré todo a tiempo, pero creo que este semestre intentaré hacerlo de la manera correcta (como se supone que debe ser). Hasta el momento voy bien. Espero que mi carácter voluble no interfiera con mis planes.

Supongo que a esto se refería aquel maestro cuando mencionó que debería resolver mis problemas de estrés, en ocasiones he llegado a pensar que me parezco al conejo blanco, observando el reloj a cada instante y preocupándome porque se me hace tarde, siempre. ¿Ustedes nunca se han sentido así?

En otras noticias, ¿nunca les ha pasado que, un día, al despertar, se dan cuenta de que su alter ego no aparece por ningún lado? ¿no? ¿en serio? bueno... a mi me acaba de ocurrir, en estos días. Según parece, el mago se ha ido, no se si voluntariamente o forzado por alguna fuerza ajena a la nuestra; esperemos que esté en algún lugar seguro, mientras tanto, seguiremos esperándolo (bueno, no se ustedes, pero yo si).

Así que, sin más que añadir por el momento, me despido... nos leemos en el siguiente post, damas y caballeros. Peace&Love